El desarrollo neurológico del bebé es motivo de preocupación constante en muchos padres quienes desean potenciar en sus hijos todas sus capacidades cognitivas.
Cuando examino los bebés en mi consulta los padres siempre muestran orgullosos los logros psicomotores del bebe, especialmente cuando su hijo pertenece al grupo de recién nacidos de alto riesgo biológico.
El término de RECIÉN NACIDO DE ALTO RIESGO se refiere a todo aquél que por sus antecedentes prenatales, perinatales o postnatales puede presentar alteraciones o anomalías en su desarrollo motor, sensorial, cognitivo o conductual, pudiendo ser éstas transitorias o definitivas
Para garantizar un adecuado neurodesarrollo es recomendable que los recien nacidos de ALTO RIESGO reciban atención temprana para estimular y favorecer el neurodesarrollo y minimizar el impacto de las patologias desarrolladas durante el processo perinatal
La atención temprana entonces, se define como “el conjunto de intervenciones, dirigidas a la población infantil de 0 a 6 años, a la familia y al entorno, que tienen por objetivo dar respuesta lo mas pronto posible a las necesidades transitorias o permanentes que presentan los niños con trastornos en su desarrollo o que tienen riesgo de padecerlos. Estas intervenciones, que deben considerar la globalidad del niño, han de ser planificadas por un equipo de profesionales de orientación interdisciplinar o transdisciplinar” (Libro Blanco de la Atenciõn Temprana, 2000)
Entonces os preguntaréis: ¿qué nino debe ser incluído en un programa de atención temprana?
Aunque existen diferentes clasificaciones, quiero mostrarles la que utiliza La Sociedad Española de Neonatología y el Libro Blanco de la Atención Temprana, quienes establecen dos grandes grupos de riesgo: riesgo biológico (englobando el riesgo neurológico así como el sensorial visual y auditivo) y riesgo social.
Los factores de riesgo biológico reconocidos actualmente son:
💥Nacidos < 1.500 g o edad gestacional < 32 semanas
💥Convulsiones neonatales o síntomas neurológicos > 7 días
💥Apgar < 3 a los 5 minutos o pH arteria umbilical < 7
💥Necesidad de ventilación mecánica prolongada
💥 Hiperbilirrubinemia > 25 mg/dl
💥 Infección congénita pre o postnatal del SIstema Nervioso Central
💥 Hijo de madre VIH, madres adictas a drogas y/o alcohol
💥 Neuroimagen patológica (hemorragia, hidrocefalia…)
💥 Trastornos genéticos dismórficos o metabólicos en familiares directos
💥 Síndromes malformativos
💥 Riesgo de hipoacusia por antecedentes familiares de sordera o administración de fármacos ototóxicos
Por otro lado, los factores de riesgo psicosocial son:
➡️ Por parte del niño
• Gemelaridad
• Patología somática precoz (hospitalizaciones prolongadas o frecuentes,
pruebas diagnósticas frecuentes y/o cruentas…)
➡️ Por parte de la relación niño-entorno
• Separaciones repetidas o prolongadas
• Carencias afectivas/materiales
• Malos tratos
➡️ Por parte del entorno familiar
• Conflictos abiertos
• Separación
• Enfermedades crónicas somáticas o psiquiátricas (especialmente depresión materna, adicciones…)
• Muerte de uno de los padres
• Familia monoparental
• Padres adolescentes
➡️ Por parte del entorno socioeconómico
• Problemas socio-familiares
• Falta de recursos económicos
Cualquier duda que tengas sobre el desarrollo de tu bebé, o si posee alguna característica de riesgo consulta con tu pediatra
Dra Mayerling Zabala, Pediatra