La carne de vaca puede ofrecerse desde los seis de meses de vida en la introducción de los nuevos alimentos, sin embargo suele ser más difícil de masticar que el pollo y el pavo, por eso no suele ser de las primeras opciones.
Es importante ofrecerla bien blanda; cocinarla en la olla a presión es una buena opción para lograr una textura adecuada.
Si ofreces BLW recuerda cortarla en sentido transversal a sus fibras antes de cocerla para que se deshaga en fibras mejor toleradas durante la masticación.
Es importante recordar los cuidados que debemos tener en relación a la carne roja:
- Evitar carne poco cocinada por riesgo de toxiinfección alimentaria hasta los 3 años.
- Evitar carne de animales cazados con munición de plomo hasta los 6 años ya que puede afectar al desarrollo del sistema nervioso central
¿Ya vuestros hijos comieron carne roja?.
Dra. Mayerling Zabala
Pediatra especialista en alergias y nutrición infantil